Ideas jóvenes para el futuro

Mateo Agüero, durante la presentación oficial del cargador solar en el stand de SECITI, en el marco de la FNS 2023. (Foto: Raúl Caliva)

Por Romina Maina I 14-03-23

Hablar de ‘startup’, incubación y aceleración de proyectos, forma parte del lenguaje común del llamado ecosistema emprendedor, aunque no son los únicos términos. Es frecuente escuchar también palabras como ‘Jam’, ‘Hackathon’ y ‘Networking’ (por sólo citar algunos ejemplos) para definir propuestas -que con variantes- se abren como “laboratorios” de exploración e investigación en la búsqueda de soluciones y estrategias para dar respuesta a nuevas y diferentes demandas.

En la base de todas estas iniciativas está el desarrollo tecnológico y el trabajo colaborativo. Sobre estos pilares, se promueven mecanismos de cooperación para la obtención de objetivos comunes  y  que estén en sintonía con un mundo en transformación y, para concretarlo, se requiere de personas altamente capacitadas.

En este sentido, la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación del Estado Provincial avanza con diferentes programas y convocatorias orientados a fortalecer proyectos de base innovadora que puedan tener un impacto favorable en la región y especialmente en el desarrollo socio-productivo de la provincia.

Uno de ellos es el EBI (Empresas de Base Innovadora) que consiste en la incubación de proyectos (acompañando la generación de nuevas ideas) o su aceleración (en caso de que ya existan y se necesite potenciar productos o servicios) brindando capacitación y financiamiento económico estatal con aportes no reembolsables (ANR).

Este programa -como otras acciones que lleva adelante el área- se propone, además, robustecer el trabajo alrededor de las plataformas estratégicas sobre las que se estructura el plan de desarrollo de la provincia con un rol central de la ciencia y la tecnología para los próximos años. Estas son: agua y medio ambiente, alimentos y semillas, minería y metalmecánica vinculada, salud, medicamentos y dispositivos médicos, economía 4.0, astronomía y energías renovables (solar, hídrica o eólica). Este último apartado, resulta un área estratégica importante ya que se sostiene en fuentes naturales que son inagotables y de gran potencial, porque se trata de recursos con disponibilidad abundante en esta región de Cuyo.

Como resultado de la última convocatoria realizada en 2022, se presentaron 120 proyectos de los cuales fueron elegidos 11 que estaban en condiciones de ser acelerados y 9 para incubación. Dentro de esta última categoría, figura la iniciativa de Mateo Agüero y Alexis Montaños, dos jóvenes sanjuaninos que apostaron por desarrollar cargadores solares, que son dispositivos electrónicos para suministrar energía a las baterías de otros dispositivos y periféricos (celulares, joysticks, auriculares, etc.) aprovechando la luz del sol como fuente natural de energía.

Objetivo logrado. La dupla de desarrolladores conformada por Alexis Montaños y Matias Agüero, se encuentra en etapa de producción de los primeros 20 cargadores solares que funcionan en base a energías limpias. De ese total ya tienen vendidos 10 dispositivos. El precio es de $30.000.

En plena creación. Alexis Montaños durante el proceso de trabajo. A través del programa EBI, los jóvenes obtuvieron una computadora y una impresora 3D, dos elementos imprescindibles para la puesta en funcionamiento de su pequeña empresa. En febrero de 2023, durante la FNS mostraron el dipositivo por primera vez al público.

La idea surgió el año pasado mientras cursaban el último año del secundario en la especialidad de energías renovables de la escuela técnica EPET Nº 7 y tomó forma definitiva con el lanzamiento oficial del producto durante la Feria Temática de la edición 2023 de la Fiesta Nacional del Sol. Hoy, el proyecto es una realidad concreta y por estos días la dupla de desarrolladores está abocada a la producción de la primera tanda de 20 dispositivos para ser puestos a la venta en el mercado.

“Sabemos que estamos en un mundo que está evolucionando cada día y las energías limpias son el futuro. Es el paso a un mundo más ecológico donde podamos vivir sin tantos contaminantes. Aunque siempre va a haber algún tipo de impacto en el medioambiente, la idea es reducir esos contaminantes al mínimo”, expresó Mateo en comunicación con Plataforma GAIA. A su vez, el joven opinó sobre el panorama que avizora en este campo a nivel provincial: “Es muy bueno lo que está pasando con la instalación de los parques solares y las posibilidades que se abrirán a partir de la puesta en marcha de la fábrica de paneles (EPSE)”.

Características del equipo. El cargador solar mide 14 cm de largo, x 7 de ancho y tiene un alto de 3 cm. Es compatible con celulares, teclados y auriculares inalámbricos y joystick. No tiene capacidad para cargar la batería de una notebook pero sí la de una tablet. El modelo sólo admite la provisión de energía a un solo aparato por vez. Ya trabajan en una versión premium para dos dispositivos y con mayor capacidad.

Mateo y Alexis cursaban el último tramo del año escolar y entusiasmados con la propuesta de participar en el EBI, se pusieron a trabajar en el desarrollo del cargador solar. Para ello, tomaron como referencia un modelo existente en la institución educativa y crearon una nueva versión con un diseño propio. Directivos y docentes tuvieron también un rol clave en la asistencia técnica, contención y acompañamiento de los jóvenes (en un principio participó un número mayor de estudiantes) para avanzar en cada una de las etapas.

“El trabajo con los docentes ha sido fantástico. Con Enrique Pogorzelec aprendimos a trabajar con la impresora 3D y Raúl Giménez (quien era el creador del cargador original que estaba en la escuela) nos dio muchísimas ideas de qué podíamos hacer y qué cosas podían modificarse para que funcione de manera más eficiente. Los profesores de la escuela se portaron muy bien y también los directivos”, contó Mateo.

Al mismo tiempo -ya como egresado del establecimiento educativo- ponderó el aprendizaje y experiencia que obtuvo durante su formación como estudiante para asumir proyectos de esta envergadura que le permitan abrirse camino en el mundo laboral: “Nos sentíamos preparados. Ese año habíamos arrancado con un proyecto que consistía en la fabricación e instalación de una planta fotovoltaica en el mismo predio de la institución. La escuela viene trabajando muchísimo con el tema de las energías y articulando acciones con empresas como Nielsen y Loma Negra”.

En San Juan los primeros avances en el uso de fuentes renovables se hicieron con la generación de energía hidroeléctrica a partir del aprovechamiento del agua almacenada de los diques Ullum, Caracoles, Punta Negra y Cuesta del Viento. La segunda gran apuesta fue la fotovoltaica por la enorme incidencia del sol en la geografía local. Hoy, ambas formas de producción de energía son los pilares sobre los que se sostiene la generación de energías limpias a nivel provincial.

Por otro lado, hay pasos concretos realizados también en el uso de otras formas de energía para un desarrollo sustentable. Es el caso de la geotérmica (aplicada por ejemplo en el Complejo Ambiental Anchipurac) y el hidrógeno verde, según manifestó a este medio la Secretaria de Ciencia, Tecnología, e Innovación, Ing. Marita Benavente.

Ciencia y tecnología, claves del desarrollo. El programa EBI, es una de las acciones que lleva adelante la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, orientadas a la creación y fortalecimiento de empresas de base innovadora. La titular del área es la Ing. Marita Benavente.

Frente a este panorama, la titular del área opinó sobre el nivel de desarrollo de las energías limpias en la provincia y sus alcances: “Podemos decir que en San Juan hemos logrado niveles de liderazgo en la Argentina porque abastecemos casi el 40% de la energía que consumimos los sanjuaninos con renovables. Estamos llegando con niveles muy altos de soberanía energética. Queremos avanzar hasta el 100%. En este momento la solar es la que tiene mayor peso en la generación de energía porque el agua está muy baja y hay que cuidar la cota mínima de los diques, pero hubo otros años en las que estuvieron en un nivel parejo en cuanto a generación”.

¿Cómo se integran todas estas acciones? Para Benavente la respuesta es sencilla, si se piensa en cadenas productivas conformadas por distintas actividades relacionadas entre sí. “Toda plataforma tecnológica tiene una cadena productiva. A todos los Estados les conviene integrar cada eslabón de esa cadena. Hasta ahora San Juan tiene dos eslabones de la cadena integrados. La fábrica de paneles fotovoltaicos que pronto van a inaugurar y el tendido de parques para la generación eléctrica. Entonces fabricás los paneles que te compra una empresa para hacer un parque. Así se va multiplicando esa cadena” expresó.

Y por eso consideró de gran importancia iniciativas como la de Mateo y Alexis, y las oportunidades que se abren en este campo a partir de la generación de nuevas actividades económicas: “Estos chicos están integrando esa cadena y van a poder comprar el panel en San Juan para fabricar el producto en la provincia porque vamos a tener fábrica de paneles solares en Pocito”.

Otro de los puntos centrales que subrayó Benavente es la generación de empleo para fortalecer el sistema: “Nosotros tenemos que poder crear trabajo. Una sociedad que crece necesita también crecer en proyectos empresarios, entonces tenemos un gran compromiso desde el Estado de impulsar la creación de nuevas empresas. Y hay varios esfuerzos no solamente desde la SECITI, también desde el Ministerio de Producción, y las agencias”.

Para este año el objetivo es poder incubar 50 proyectos en una nueva convocatoria EBI. Además, el área busca afianzar esa iniciativa con el inminente lanzamiento de un nuevo programa denominado “Jóvenes que Emprenden e Innovan” (JEI). Se trata de una acción que apunta a formar a estudiantes en el armado de proyectos de innovación. La intención es que ambos programas puedan complementarse y que quienes participen del JEI lleguen con mejores herramientas para aplicar luego al EBI.

“Nos dimos cuenta que la pulsión innovadora es mucho más potente en jóvenes de nivel secundario, especialmente aquellos que cursan los últimos años de escuelas técnicas y agrotécnicas. De tal manera queremos alcanzar 80 proyectos, de los cuales 30 provengan de los más jóvenes y 50 de aquellos con un poco más de experiencia, que pueden ser profesionales o no, pero de mayor edad”, evaluó la funcionaria sobre la motivación de sumar una nueva convocatoria que ya genera grandes expectativas.

Para poder dimensionar lo que significa este número lo comparó con lo que sucede en Santa Fe: “Allí se incuba entre 50 y 80 proyectos por año. Es decir, estamos alcanzando los niveles de esa provincia que es una de las más potentes en términos de incubación de proyectos tecnológicos”.

Pero además de acompañar en la creación o fortalecimiento de un producto o servicio, el EBI tiene como uno de sus objetivos centrales que la empresa logre vender. Es por eso que la última etapa del programa se cumple con lo que se denomina Demo Day (o día de la demostración por su traducción al español) que consiste en la exposición de los productos o servicios frente al sector privado. Esto ocurrirá en este mes de marzo con los 20 proyectos ganadores de la convocatoria 2022, según adelantó Benavente.

Esa instancia es central porque ella considera que “no hay innovación si no hay venta del producto innovador. La innovación debe llegar hasta el final porque sino generamos buenas ideas, buenos productos pero nadie te los compra. Vos podés hacer cosas fantásticas, nuevas, pero si ese producto no se coloca en el mercado no se considera una innovación. La gente no lo adoptó”.

Sin embargo, son muchos los factores que inciden en la supervivencia de un proyecto. Y es sabido que una idea buena nunca es suficiente ni garantiza el éxito, aún si su creador recibe aportes económicos que le den impulso. Ante esto, la ingeniera sostuvo que por eso mismo la apuesta debe ser mayor y se mostró optimista frente al futuro: “Sabemos que hay niveles de mortalidad como le decimos a las empresas de emprendedores y por eso vamos tan alto, hasta 80 porque hay proyectos que no prosperan, pero nos vamos a quedar seguramente con un puñado de buenas empresas competitivas de distintos sectores que nos van a permitir generar nuevas empresas para tener nuevos puestos de trabajo en el futuro”, concluyó.

Avanzar en energías renovables es de capital importancia dado que se trata de buscar alternativas al uso de energías convencionales (que explotan recursos limitados y provocan un impacto negativo en el medioamente, como el petróleo, el gas y el carbón) y es un tema central de los países a nivel mundial (incluida la Argentina) que con desarrollos disímiles avanzan en la transformación de la matriz energética. Y San Juan cuenta con avances concretos en este campo y potencial de talentos jóvenes dispuestos a afrontar el futuro que viene.